Hoy estamos muy contentos comenzamos una nueva serie estudiando uno de los pasajes más hermosos de todo el Nuevo Testamento escuche la lectura dramatizada: “Hace mucho tiempo, Dios habló muchas veces y de diversas maneras a nuestros antepasados por medio de los profetas. Y ahora, en estos últimos días, nos ha hablado por medio de su Hijo. Dios le prometió todo al Hijo como herencia y, mediante el Hijo, creó el universo.” Hebreos 1:1,2 NTV

Si es el comienzo del maravilloso libro de Hebreos. Este libro se escribió en una época temprana antes de la destrucción del Templo en el año 70 d.C. ¿Quién fue su autor? Las teorías son diversas: Pablo, Bernabé, Apolos, Priscila y Aquila. La respuesta la da la primera palabra del Libro DIOS. Su inspiración no hay quien la ponga en duda. Dios ha hablado.

Me recuerda el Génesis “En el principio DIOS” Gn 1:1 no hay necesidad de dar ningún argumento solo creer DIOS, él es el YO SOY EL QUE SOY. Juan en su evangelio nos dice “Y la palabra es DIOS” Jn 1:1 Es el mismo concepto del autor del libro Dios existe, es real, eterno simplemente es DIOS nuestro Padre.

Lo que sigue es un excelente juego de palabras en el idioma original “habiendo hablado muchas veces y de muchas maneras en otro tiempo” ¿A quién hablo? ¿Por medio de quién? Dice “a los padres por los profetas,” sin dudas es una fuerte prueba de la inspiración del Antiguo Testamento.

Lo que el autor nos quiere transmitir va más allá de lo que dice. En el pasado Dios nos habló “muchas veces y de muchas maneras” durante un período de mil años en el que se escribió el Antiguo Testamento Dios hablo muchas veces, a los patriarcas, a Moisés, a los Jueces, Reyes, coperos, sacerdotes, artesanos y profetas. En los distintos periodos de la Historia de Israel. De muchas maneras de forma directa, revelaciones, sueños, visiones, profecías o desde una zarza ardiente. En profecías, historias, parábolas, poesía y escritos.

Pero sabe que a pesar de hacerlo “muchas veces y de muchas maneras” durante un milenio, todavía estaba incompleta, era como un humo no se había dado a conocer completamente. Faltaba lago para que esa forma de hablar estuviera completa. Estas “muchas veces y maneras” apuntaban a algo mayor que ellas mismas y que era necesario conocer.

Pasaron unos quinientos años de silencio y “en estos postreros días nos ha hablado por el Hijo, a quien constituyó heredero de todo, y por quien asimismo hizo el universo;” para los judíos “los postreros días” estaban relacionados con la venida del Mesías su libertador.

Tratemos de imaginar lo que el texto nos quiere decir, Dios había hablado “muchas veces y de muchas maneras” todo apuntaba a un futuro, esos “postreros días”. Miles de años de revelación se vienen a cumplir en un momento de la historia humana la encarnación del Hijo de Dios. El verbo encarnado de Juan, la Palabra revelada, Dios con nosotros.

El humo se disipo y finalmente podemos ver y oír ¡DIOS NOS HA HABLADO POR MEDIO DE JESÚS! Lo que se resume en un corto periodo de tiempo, en una persona, en tres días, morir, ser sepultado y levantarse victorioso de la tumba. Lo que Dios nos dice todo apunta a la cruz.

Es al Hijo “a quien constituyó heredero de todo” constituyo, designo, nombró heredero el diccionario Vine nos dice: uno a quien Dios le ha asignado algo, no habiendo entrado aún, sin embargo, en posesión de aquello. La idea no es solamente que Dios nos hablado por medio de Jesús, es que a él se le ha entregado o recibido todo de parte del Padre.

“y por quien asimismo hizo el universo” es Cristo la razón por la que todo fue hecho, nos recuerdan las palabras de Juan años más tarde “Todas las cosas por él fueron hechas, y sin él nada de lo que ha sido hecho, fue hecho.” Jn 1:3

Siempre fue el plan de Dios hablar a los hombres por medio de Jesús.

Dios ha hablado de “muchas veces y de muchas maneras” así lo hizo durante mil años con el pueblo de Israel. Esto era solo un velo, una cortina de humo de lo que sucedería en los postreros días. Todo apuntaba a un momento, todo apuntaba a la cruz del calvario y a la mañana de resurrección.

Todos los que vivieron antes de ese momento murieron con esa esperanza y no lo pudieron ver. No todos tuvieron el privilegio de estar esas “muchas veces” en la que Dios habló. Moisés decía al pueblo: “Ojalá todo el pueblo de Jehová fuese profeta, y que Jehová pusiera su espíritu sobre ellos.” Nm 11:29

Los que hoy vivimos en esos postreros días podemos decir Dios nos hablado por medio de su Hijo, es más nos ha mostrado su amor. Y aunque ya todo fue revelado podemos decir con seguridad DIOS HOY ME HABLA POR MEDIO DE SU HIJO.